lunes, 3 de diciembre de 2007

QUIERO ESTUDIAR LETRAS MUSICALES

1 semana. 7 días. 168 horas. 10.080 minutos. Esto es lo que me separa de los exámenes finales del primer trimestre. A tan solo 7 días me invaden una serie de dudas, de preguntas que por desgracia no encuentro respuesta alguna (nada raro viniendo de mi...).

¿Quién no se ha preguntado alguna vez quién sería el inventor de los dichosos exámenes? Tengo que admitir que me he parado a buscar esta información. Intenté averiguar el inventor tan buscado. La persona que fastidia a millones de personas. A millones de estudiantes que aspiran a aprobar, a sacarse un título universitario, a poder graduarse, a conseguir unas oposiciones... Hay muchos tipos de exámenes además... ¿Quién será la persona que está fastidiando a tanta gente? (bueno, que NOS está fastidiando...)

Por mucho que busque en diferentes buscadores no encuentro respuesta alguna. Simplemente es curiosidad, simplemente es orgullo propio, simplemente es por perder el tiempo... Eso es otra de las cuestiones que me invaden. ¿Por qué cuando tenemos que estudiar nos entretenemos en chorradas, en cosas que no haríamos a no ser porque tenemos que estudiar? Hay un sinfín de cosas que hacer: lavar el coche afondo (con aspiradora inclusive), instalar programas en el ordenador (que posiblemente nunca se harán servir), romper papeles antiguos, ordenarse el escritorio (después de meses sin ver el color de la madera...), ordenarse el armario (y descubrir prendas de ropa que ni recordabas que tuvieras), jugar al tetris, hacer perdidas a tu gente, pintar papelitos....

Otra de las preguntas sin respuestas para esta época es ¿por qué NO olvidamos letras de canciones de hace años y sin embargo no nos acordamos de lo que nos entró en el último examen? Es curioso, la facilidad de aprenderse las letras de las canciones y lo que perduran en nuestra mente. Sin embargo, el temario se va, nos abandona, toma rumbo a otro lugar... Ojalá estudiar fuera tan fácil como cantar. Ojalá estudiar fuera tan rápido como escuchar una melodía y poder recitarla a los pocos minutos. Ojalá estudiar no fuera evaluado en un futuro. Ojalá los exámenes no existieran.....

Ojalá...

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