Sí, lo reconozco abiertamente, creo en el destino.
Creo en que todo pasa por algo, porque estamos predestinados a algo en concreto en esta efímera vida. Creo que actuamos por motivos varios, que son los que en definitiva nos hacen actuar para llegar a lo que nuestro destino marca. ¿Quién lo fija nuestro destino?
Una pregunta que sin duda no podría encontrar respuesta a lo largo de mi vida, pero que sí, sorprendentemente, hace tan solo unos meses, alguien me la llegó a contestar de manera imprevista y delante de ciertas personas. Alguien supo hallar, en efecto, la respuesta a mi pregunta. La respuesta a ciertos de mis pensamientos y acciones. Alguien supo poner en boca algo tan importante como mi destino. El destino. Nuestro destino.
Unas palabras que aún permanecen, y sé que lo harán por mucho tiempo más, en mi mente. El destino está en cada cruce. Esa fue una respuesta que hoy día, me sigue inquietando, apasionando y sobre todo, emocionando. Lo malo: hay demasiados cruces... A lo largo de nuestros días son tantos los cruces que se interponen en nuestro camino, que es casi imposible encontrar exactamente el cruce que te lleve a tu destino...
Hoy por hoy, me quedo con la respuesta de mi vida:
"El destino está en cada cruce"
No hay comentarios:
Publicar un comentario